Comenzamos a existir

| Iñigo Pacheco | Noticias 2008/09

Construyendo.

Aunque en los últimos días, tal como refiere Melisa, la sección femenina cuenta con una planta propia en el servicio de traumatología, creo necesario llamar la atención sobre un par de hechos que evidencian el progreso de las chicas y que quizás hayan sido poco valorados por las propias protagonistas.

El pasado viernes las minis disputaron el partido de la ilusión frente a Sant Josep, plaza para el campeonato de Mallorca en juego. Un partido cuya mera disputa ya constituye un primer éxito; un partido jugado con carácter y nervios: al fin y al cabo, no dejaba de ser el primer partido de verdad que disputaban en su corta trayectoria, aunque como señalo alguna de sus componentes había disfrutado.  Sin olvidar que el relevo ya esta ahí, bien el mini de Sergi que aguantó con dignidad y juego toda una primera parte a sus compañeras de club, bien con las llamadas princesas toons. Y detrás, llegan más guerreras.

Por otro lado, y pese a los últimos resultados, las infantiles siguen optando a las plazas que dan derecho a participar en el campeonato de Mallorca, con un poco de confianza en sus posibilidades y frescura seguro que pescan en agua prohibidas y dan un salto hacía adelante

Y las cadetes, en su duro abrir camino, labor sin recompensa externa, con sus escasos efectivos compiten con dignidad en un grupo muy igualado, con el inestimable apoyo de las infantiles, circunstancia que beneficia ambos equipos. 

Y lo mejor está todavía por llegar. 

Por qué si los entrenadores, y yo el primero, hablamos más de Club y menos de mi equipo, mejoraremos; si los entrenadores, y yo el primero, facilitamos la escalera, el jugar con el equipo de categoría superior, mejoraremos (aquí el único inocente es César); si los entrenadores, y yo el primero, nos centramos más en el resultado interno que en el externo, mejoraremos (con independencia de las reseñas anteriores, que tan sólo evidencian un progreso con relación a los demás); y si desdramatizamos los resultados externos, cuyos reveses son parte intrínseca de cualquier práctica deportiva, mejoraremos; y si desde las bandas, oímos menos reclamaciones, y  más vamos SALLE, mejoraremos.

La conclusión es muy simple: Seremos lo que queramos ser, pero todos en la misma dirección.