JJOO: España pasa por encima de Yao Ming en un esperanzador estreno

Marca.com.- España arrancó con buen pie en baloncesto al lograr una contudende victoria ante China por 83-58. El equipo de Mario Pesquera jugó con mucha seriedad y cimentó su triunfo en una defensa que funcionó a la perfección. El único aspecto negativo del juego español fue el lanzamiento de tres puntos. Todos los integrantes del equipo español hablaban de la necesidad de lograr la victoria en el primer partido de los Juegos para sacudirse los nervios inciales. Y no sólo lograron el triunfo, sino que consiguieron transmitir una sensación de solidez propia de los equipos que aspiran a estar en el podio.

El partido sólo fue igualado en el primer cuarto. Gasol recibió un golpe en el salto incial y no sólo quedó aturdida su cabeza, sino todo el equipo español, que echó en falta la referencia del jugador de Memphis. Sin Pau, España se perdió en continuos lanzamientos de tres fpuntos, Yao Ming dominó la zona y cargó de faltas a Garbajosa y Dueñas. Sólo Navarro fue capaz de mantener a flote a España, que solventó todos los sus problemas en ataque con una defensa que terminó desquiciando a los jugadores chinos. A Mario Pesquera le encanta el buen baloncesto en su propia canasta, y España demostró que ha captado el placer de su técnico por impedir jugar al rival.

Tampoco es que China fuera un rival difícil de defender. De hecho, con la entrada de Gasol al comienzo del segundo cuarto se terminaron gran parte de los argumentos chinos. Yao Ming dejó de reinar en la zona y se vio desbordado por el duo Pau-Felipe Reyes. Entre los dos anotaron 16 puntos en el segundo cuarto y, unido a la pizca de intensidad que le faltaba al juego español, propiciaron las primeras ventajas para España, que se fue al descanso con el partido encarrilado (42-30).

Descaro e intensidad defensiva Si España estaba defendiendo bien, la entrada de Rodrigo de la Fuente terminó de apuntalar el juego español, que sólo se vio inquietada en el marcador mediado el tercer cuarto (48-40). Pero con Yao Ming atenazado por las faltas personales, China se perdió en continuos lanzamientos de tres puntos que no hicieron más que aumentar la diferencia española. Navarro contagió su descaro al resto y Pesquera consiguió mantener la intensidad en el juego a pesar de sentar a los titulares.

Hasta Jaume Comas se creció con el marcador a favor. El base ganó la seguridad perdida en los partidos de preparación y dirigió con acierto a España, que terminó el partido con Yebra en la cancha e Iturbe en el puesto de cuatro. Puestos a crecerse, hasta Mario Pesquera se gustó ante un técnico NBA en el banquillo contrario.